Emitían esta misma semana en la caja tonta un reportaje sobre un experimento particular: aparcaban un coche en la calle con banderas, pegatinas y demás parafernalia en cuatro ciudades de España para ver las reacciones de los ciudadanos. En Sevilla y Murcia eligieron banderas catalanas y vascas respectivamente, mientras que en el País Vasco y Cataluña pusieron la bandera española por todas partes.
El comportamiento de sevillanos, murcianos y catalanes puede entenderse como la normal en la iberia de estos días. Un par de insultos, algún otro que se para, pero el asunto se queda ahí, en una simple anécdota.
No obstante, en un municipio de Guipuzcua - concretamente en Fuentebarria - las reacciones no se hicieron esperar, y especialmente destaco las de unas mujeres entradas en año que tuvieron el siguiente diálogo:
- ¿Y este coche?Lo podéis ver en el siguiente video:
- ¿Has visto?
- ¿Qué pone ahí?
- España, España , el toro...
- Uy la hostia...
- Saca la gasolina
- Yo no, yo no, luego lo veo por la ventana toda la noche
- ¿Tienes un spray?
- No...
- Bueno, ¿y HB dónde está? ¿dónde está ETA?
Nada de chavales, ni de los cachorros de la kaleborroka, mujeres hechas y derechas que tendrán a sus hijos en su casa; que les inculcarán que la mejor solución es coger el spray, la gasolina o preguntarse donde está ETA cuando se ve la bandera de España.
Viva el pacifismo.
Viva el pacifismo.