Cualquier mujer puede contar anécdotas del estilo; el estar con sus amigas, en una discoteca, restaurante o cafetería, que una se fije en cierto chico que pase por delante, y que otra de sus serviciales compañeras marujas sabelotodo le ponga al día en un minuto de lo cabrón que es. Una conversación típica sería : ése le hizo la vida imposible a fulanita y la dejó por menganita. Es un cerdo, ni se te ocurra acercarte a menos que te gusten los dolores de cabeza innecesarios e inútiles y quieres estar llorando dentro de unos meses. Vaya pedazo de cabrón.
Más o menos esta parodia de conversación, se está llevando a la práctica en Internet con bastante éxito. Una web yanqui reúne las fichas de una multitud de hombres que han tenido relaciones un poco tortuosas con mujeres. Éstas, delante de su teclado, no tienen ningún reparo en contar las personalidades de sus ex para que otras no caigan en el mismo error:
La página web www.dontdatehimgirl.com (no quedes con él, chica). Allí están los perfiles de unos 18.000 hombres, en ocasiones acompañados por una fotografía, en los que advierten del peligro inherente a salir con ese individuo. El portal ha sido demandado en Estados Unidos y deja dudas sobre los límites jurídicos en Internet y el derecho a la intimidad: en ella se vierten fuertes acusaciones, usualmente desde el anonimato, y con impunidad pues los responsables de la página web no verifican la veracidad de lo que publican.
La verdad, los testimonios de estas féminas, tengo que reconocer que me han hecho reír un poco:
Parásito para todas las mujeres. Infiel en serie, mentiroso patológico. Busca mujeres casadas de entre 45 y 55 años con mucho dinero. Siempre tiene a más de una mujer, así que cuidado, chica. Aléjate si valoras tus bienes y tu cuenta bancaria.
Me engañó, pero volví con él y ahora estoy embarazada, al igual que otras dos chicas. Es un mentiroso. Te dirá que tiene 20 o 21 pero sólo tiene 19. Vive con su abuela y tiene los dientes de arriba torcidos. También tiene un tatuaje de un corazón roto en el brazo derecho. ¡Tened cuidado!
Actúa como un sueño hecho realidad al inicio de la relación pero después cambia. Se vuelve quisquilloso con cualquier detalle sobre tu apariencia y tu personalidad. Subió a Internet fotos mías en un sitio de servicios eróticos. Es un sociópata, pero adorable.
Y lo han hecho, porque me las he imaginado con qué rabia y cabreo se han puesto a describir su versión de las antiguas relaciones que hayan podido tener. Porque algo está claro, en mucho de los casos, el hombre habrá podido ser un granuja pero seguro que la exageración ha estado presente a la hora de realizar esas descripciones.
El problema de que las mujeres se desfoguen de tal manera es primordialmente el derecho a la privacidad de estos hombres, que pueden llegar a sufrir consecuencias indeseables como pérdida de trabajo, acoso, y la imposibilidad de volver a tener una relación otra vez. Una cosa es que algún sujeto de éstos reciba una reprimenda y, otra muy distinta, es que su perfil esté público para que todo el mundo lo vea. En fin, me pasaré por la web a echar un vistazo y a repartir mentalmente unos cuantos vallium para histerias postrelacionales; y también, claro está, porque nunca está de más saber con quién no te debes encontrar. Ya sabéis, la curiosidad mató al gato.
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