Se supone que hoy es el día en el que el resto de mortales se acuerdan de que existimos. Este día de marzo nos representa a aquellas que partimos nuestra vida en trocitos y trabajamos mientras somos amas de casa, madres, esposas y no sé cuántas cosas más. Ya saben, algunas féminas no pueden estarse nunca quietas. No obstante, espero que cuando tenga nietos, me haya jubilado y ya no esté en la circulación, este día, este fatídico día desaparezca del calendario.
Detesto los días señalados, ésos que se te dicen que hay que celebrarlos porque sí, que te marcan como diferente. Realmente, la auténtica igualdad será cuando las mujeres no necesitemos tener un día para nosotras solas, que no se nos mire hoy como si estuviéramos haciendo un milagro por tener un empleo, y en especial, que no me recuerden que es una cabronada ser mujer en el mundo de actual. Y mucho menos que se nos diga cómo debemos ser.
Prefiero seguir andando mi camino sin que nadie me dé palmaditas en la espalda por lo que hago o dejo de hacer. Algunas personas, no necesitan de un contínuo reconocimiento de su ego para seguir haciendo las cosas tal como siempre. Simplemente, se hacen sin pensar en lo que los demás pueden pensar de ti. Además, puestos a que me regalen una rosa, seguro que a más de una nos hace ilusión que nos la ofrezcan mañana que en un día como el 8 de marzo. ¿no?
En fin..feliz día...de...
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